Pregúntale a cualquier millonario acerca de la importancia de ahorrar y te dirá que es el primer paso para comenzar a generar riqueza. Aquí te ofrecemos algunos consejos sobre cómo comenzar. Si incorporas el ahorro a tu vida ahora, te será más fácil ahorrar en el futuro.
Cada vez que recibas dinero, ahorra una parte.
Ahorrar con regularidad es el secreto número uno para generar riqueza. Convierte al ahorro en un hábito para toda la vida. Si siempre ahorras al menos el 10 % de tu dinero, siempre tendrás dinero de sobra del que puedes obtener un rendimiento.
Si tienes una cuenta corriente, puedes suscribirte al retiro automático para que te resulte más fácil ahorrar. Solo dinos la fecha que más te conviene, y cada mes transferiremos dinero desde tu cuenta corriente a tu cuenta de ahorros.
Debes saber por qué estás ahorrando. Establece objetivos.
Si hay algo que deseas comprar pero no puedes pagarlo ahora, puedes ahorrar para adquirirlo. Tener un objetivo, como comprar un nuevo juego o una nueva prenda de vestir, te ayudará a ahorrar dinero. Recuerda siempre el consejo n.º 1 y deja parte de tu dinero en tu cuenta de ahorros para que puedas obtener un rendimiento.
Haz rendir tu dinero.
Puedes ahorrar en una alcancía, pero eso no te permitirá obtener intereses. Abre una cuenta Share Savings en Greylock y obtendrás intereses sobre todo el dinero que ahorres.
Aprovecha los beneficios de Youth Share Savings, una cuenta de ahorros de Greylock que se ofrece solo a miembros menores de 18 años, que te ayudará a obtener más beneficios sobre tus ahorros y te enseñará el valor de guardar dinero. Estas cuentas obtienen tasas más altas automáticamente sobre los primeros $500 depositados.
Gasta con inteligencia. Sabemos que puedes hacerlo.
El mejor secreto para ahorrar es saber cómo gastar. Elige cuidadosamente lo que deseas comprar. Compara diferentes productos para obtener el mejor precio. Adquiere artículos de calidad que te durarán más. Y aprende cómo hacer un presupuesto.
Buenas prácticas para personas con presupuestos moderados
Controla tus gastos. Sé previsor.
Si tienes dinero en el bolsillo, es más fácil gastarlo. Haz un presupuesto de la cantidad de dinero que tienes para gastar cada semana y guarda el resto en tu cuenta de ahorros.